Programa Jóvenes y Adultos
El Movimiento Scout es un Movimiento de auto-aprendizaje para jóvenes, que utiliza métodos de aprendizaje activos. De acuerdo con el enfoque educativo del Movimiento Scout, cada persona nace con un potencial único que puede desarrollarse en una dirección constructiva. Hacer de este potencial una realidad involucra el desarrollo de capacidades individuales – físicas, intelectuales, emocionales, sociales y espirituales. Esto se hace proporcionando un ambiente de aprendizaje que brinde apoyo y sea organizado de forma tal que estimule y desafíe a los jóvenes durante sus años de formación.
La parte esencial de la experiencia del Movimiento Scout recae en el Programa Jóvenes. El Programa Jóvenes en el Movimiento Scout no solo se refiere a las actividades que se emprenden, sino que también a cómo y porqué se ejecutan – en esencia, se refiere a la totalidad de la experiencia de un Scout a través del tiempo que permanece en el Movimiento Scout.
En conjunto, las actividades se ven como medio, en lugar de verlas como un objetivo en sí mismas. Estas actividades crean oportunidades para que cada joven desarrolle competencias y actitudes y adquiera conocimientos. Los jóvenes son los jugadores principales en este proceso educacional no formal que también requiere un Apoyo Adulto, usualmente proporcionado por adultos voluntarios.
El Movimiento Scout también se caracteriza por el hecho de ser abierto a todos, voluntario, apolítico, independiente y relevante para los jóvenes de hoy en día. A través del Programa Jóvenes, los Scouts se convierten en miembros activos de la sociedad y aprenden a dirigirse a sí mismos y a los demás. Todo mientras se divierten, porque –en palabras de Lady Olave Baden-Powell-”Si no es divertido, no es el Movimiento Scout”.
Programa jóvenes
El Programa Jóvenes es la totalidad de todo lo que los jóvenes hacen en el Movimiento Scout (las actividades), el cómo se hace (el Método Scout) y la razón por la que se hace (el propósito).
Se ejecuta a través de una alianza entre jóvenes y dirigentes adultos, teniendo en cuenta los intereses de los participantes, sus necesidades y sus habilidades.
El Programa Jóvenes en el Movimiento Scout ofrece un proceso progresivo de auto educación y desarrollo personal para niños y jóvenes. Las actividades en sí mismas difieren entre y dentro de los países (no hay un listado de actividades para todas las Organizaciones Scout Nacionales), pero todas se hacen con el mismo método y propósito que comparten.
Los ejemplos de las actividades son: los campamentos y las actividades al aire libre, los proyectos de servicio, la formación vocacional, los juegos, las expediciones internacionales, el desarrollo comunitario, la actuación y el canto, la navegación, y muchas más.Con el fin de experimentar el programa de la mejor manera posible, los Scouts se organizan en diferentes ramas por edad. Las divisiones y nombres varían entre Organizaciones Scout Nacionales, con el fin de adecuarse a necesidades y contextos. Por ejemplo, una división tradicional incluiría Lobatos (8-11 años), Scouts (11-17 años) y Rovers (17-26 años). En la actualidad varios países dividen la rama ”Scouts” en dos grupos, (Scouts de 11-14 años y Scouts Caminantes de 14-17 años) con el fin de atender las necesidades específicas de los adolescentes en cada uno de esos grupos de edad.
Adultos en el Movimiento Scout
A pesar de que los jóvenes son el centro mismo de las actividades del Movimiento Scout (escoger, planear, ejecutar y evaluar), el apoyo de los adultos es clave. Este apoyo puede ser de diferentes maneras (educacional, organizacional…) y también varía de acuerdo con el rango de edad de los Scouts. Se espera, por ejemplo, que los jóvenes de la sección lobatos requieran una mayor presencia e intervención que los jóvenes adultos de la sección Rover.
Hoy, alrededor de 7 millones de adultos están involucrados en el Movimiento Scout a nivel mundial. Estos adultos voluntarios juegan un rol esencial, son valorados y son un recurso importante. Al apoyar la creación de ambientes saludables de aprendizaje, los adultos desarrollan liderazgo, habilidades organizacionales y de comunicación, empatía, autoestima, etc.
Para que las Organizaciones Scout Nacionales (OSN) crezcan y ofrezcan un Movimiento Scout mejor a los jóvenes, necesitan atraer y retener líderes adultos motivados y calificados y mantener su empuje durante todo el tiempo de permanencia en la asociación.
Sus conocimientos y sensibilidad sobre el trabajo con jóvenes deben renovarse regularmente mediante cursos de actualización.
En los últimos años muchas Organizaciones Scout Nacionales han invertido tiempo y recursos para identificar las tendencias del voluntariado en sus países; claramente identifican los voluntarios que se necesitan en sus OSN y desarrollan estrategias y planes para reclutarlos y retenerlos. Con base en estas ideas, se han desarrollado herramientas y recursos para apoyar a los voluntarios.
Protección a la infancia
Como organización para jóvenes es importante que el Movimiento ofrezca un ambiente seguro y entretenido. Con el fin de asegurar este objetivo se ha desarrollado el programa A Salvo del Peligro. El objetivo de este programa educativo es prevenir que se presente cualquier forma de abuso y brindar a los voluntarios adultos las herramientas necesarias para asegurar el bienestar de los miembros jóvenes.